Dado que los centros residenciales que están gestionados por las organizaciones de la discapacidad permanecen abiertos y funcionando, el CERMI CV está distribuyendo a los profesionales (cuidadoras, cocineras, personal de limpieza, auxiliares, transporte, entre otros), que siguen trabajando en los mismos, los EPI para poder realizar su labor con seguridad y con el objetivo de  prevenir los contagios.

 

A esto hay que sumar la distribución de dotación a las entidades sociales de material de protección (mascarillas FFP2, mascarillas 3 capas, guantes, gafas, hidrogeles, buzos, viseras, gorros, calzas); para poder seguir atendiendo a las personas con discapacidad durante la crisis del coronavirus, en otros servicios que se siguen manteniendo en el sector, como la ayuda a domicilio o la asistencia personal, entre otros, para poder realizar su trabajo, ya que la falta de productos de contención contra el contagio se ha convertido en la necesidad perentoria de la atención de la población de riesgo: personas con discapacidad, mayores y dependientes con patologías previas.

 

El presidente del CERMI CV, Luis Vañó, ha destacado el papel del tejido asociativo en estos momentos críticos: “Resulta necesario el abastecimiento de equipos de protección individual a las entidades sociales para que puedan seguir atendiendo a las personas en situación de mayor vulnerabilidad durante la crisis del coronavirus, ya que algunas carecen de mascarillas o guantes y no cuentan con suficientes EPI para poder realizar su trabajo”.

 

“Y más, teniendo en cuenta que las entidades del tercer sector social de la discapacidad de la Comunidad Valenciana prestan Servicios Esenciales en esta crisis de salud pública y queda mas que justificado esta priorización del envío de material de protección, así como la puesta en práctica del diagnóstico rápido del coronavirus, que permitirá dar respuestas preventivas de contención y asistenciales más rápidas y eficaces”, ha añadido Vañó.

 

Por ello, ha reclamado que “todos ellos estén protegidos y que se realicen los test de Covid-19 a todas las personas que trabajan en el sector, con el fin de proteger a las plantillas y a los residentes y evitar así la diseminación del virus”.

 

Desde el CERMI CV se explica que se ha tenido que poner en marcha una operativa propia de abastecimiento de EPI a las entidades del sector social de la discapacidad en la Comunidad Valenciana, por que el abastecimiento oficial hacia estos servicios esenciales, esta siendo muy escaso.